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    Uso Indebido de Medicamentos de Venta con Receta: lo que Necesita Saber para Ayudar a su Familia

    Profesionales de la salud en Estados Unidos escriben cada año 4 mil millones de recetas médicas, por lo que es fácil entender cómo algunos de los medicamentos recetados terminan en las manos equivocadas y son mal utilizados. Cuando los medicamentos no se toman según las indicaciones o una persona los guarda para cuando cree que realmente los vaya a necesitar, se crea el riesgo para el mal uso y se pone en peligro a los niños, adolescentes y a los jóvenes de la familia.

    La mayoría de las personas que toman de manera indebida medicamentos de venta con receta tiene entre 18 y 25 años. Una encuesta nacional de estudiantes de preparatoria o bachillerato realizada en 2019 reveló que 1 de cada 7 estudiantes informó haber usado de manera indebida analgésicos recetados (opioides) al menos una vez en su vida.

    ¿Por qué los medicamentos se usan de forma indebida?

    Es fácil creer que los medicamentos de venta con receta son relativamente seguros debido a que un profesional de la salud los recetó. Además, a menudo los vemos en anuncios, lo que puede ocasionar que algunas personas crean que no son especialmente peligrosos. Sin embargo, ciertos medicamentos de venta con receta son similares en su composición química a las drogas ilegales. Si se usan mal, pueden ser bastante peligrosos.

    Las razones comunes para el mal uso incluyen:

    Curiosidad, diversión o intento por reducir la tensión

    Algunos jóvenes simplemente quieren experimentar qué se siente estar bajo los efectos de una sustancia o sentirse más relajados. Pueden usar indebidamente los medicamentos por su cuenta o para aliviar la ansiedad de encontrarse en un entorno social, o para sentirse alerta o de buen humor. Los amigos pueden presionarse entre sí para probar una pastilla diciendo cosas como “te va a gusta cómo te hace sentir”. Esta experimentación con pastillas puede ser aún más peligrosa cuando se combina con alcohol.

    El peligro se multiplica debido a la proliferación de las pastillas falsificadas o adulteradas, muchas de las cuales están mezcladas con fentanilo, un analgésico 100 veces más potente que la morfina y 50 veces más potente que la heroína. El fentanilo aumenta dramáticamente el riesgo de que una persona muera por sobredosis.

    Para mejorar el rendimiento académico o atlético

    Los jóvenes que hacen mal uso de los estimulantes de venta con receta pueden buscar aumentar su atención o mantener un alto nivel de concentración, alerta o atención. Creen que las pastillas como Adderall mejorarán su desempeño académico o atlético. Sin embargo, aunque los estimulantes pueden ayudar a corto plazo, con el tiempo se vuelven menos efectivos. Un joven necesitará cada vez más estimulantes para funcionar normalmente. Esta es la definición de tolerancia, que es un síntoma clave de la adicción. El consumo a largo plazo de estos medicamentos en realidad puede conducir a una disminución en las calificaciones o el rendimiento deportivo.

    Para aliviar problemas de salud mental o estrés

    Algunos jóvenes pueden usar medicamentos de manera indebida en un intento por aliviar problemas de salud mental como ansiedad, depresión o trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés) que no son tratados adecuadamente por un profesional.

    Numerosos factores ambientales influyen en las creencias y actitudes de una persona. Estos factores pueden contribuir a que un adolescente o joven use medicamentos de manera indebida e influyen en las consecuencias negativas que podría enfrentar. El riesgo de una persona aumenta si tiene antecedentes familiares de consumo de sustancias o adicción, si sus padres o hermanos mayores hacen mal uso de medicamentos o si tiene fácil acceso a los medicamentos en el hogar, la escuela o el vecindario.

    ¿Por qué preocuparse?

    Ciertos medicamentos de venta con receta, especialmente aquellos clasificados como sustancias controladas por la Administración para el Control de Drogas (DEA) de Estados Unidos, son productos muy potentes que tienen alto riesgo de uso indebido y de causar adicción. Por ejemplo, los analgésicos opioides son altamente adictivos, además de que son muy similares a la heroína en su composición química. Por lo tanto, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) recomiendan enfáticamente que no se receten para tratar a largo plazo el dolor crónico y que se recetan en contadas ocasiones para el dolor a corto plazo.

    Los adolescentes y jóvenes que consumen sustancias controladas corren un riesgo muy alto de desarrollar adicción a estas sustancias. El cerebro humano se desarrolla completamente hasta los primeros años de la edad adulta, generalmente entre los 25 y los 29 años de edad. Durante la etapa de crecimiento, el consumo de sustancias interfiere con el desarrollo del cerebro. Esto aumenta el riesgo de consumir sustancias para el resto de la vida y desarrollar adicción.

    Más allá del riesgo de adicción, el mal uso de los medicamentos de venta con receta puede tener graves consecuencias para la salud.

    • Los analgésicos opioides, como la oxicodona y la codeína, pueden causar fatiga y problemas estomacales. En dosis más altas, el uso indebido puede provocar dificultades respiratorias, sobredosis y muerte.
    • Los estimulantes utilizados para tratar el trastorno por déficit de atención con hiperactividad pueden provocar sensaciones de paranoia, incremento en la temperatura corporal y latidos cardíacos rápidos.
    • Los depresores como los ansiolíticos o los somníferos pueden causar dificultad para hablar, respiración superficial, somnolencia, confusión y falta de coordinación. En dosis más altas, pueden provocar una sobredosis y la muerte, especialmente cuando se combinan con alcohol.

    Lea sobre el peligro potencialmente mortal de las pastillas falsificadas

    Muchas personas que compran pastillas falsificadas creen que adquieren un medicamento específico, aunque en realidad pueden estar obteniendo un producto mezclado con fentanilo. Corren el riesgo de sufrir una sobredosis y, potencialmente, de provocarse la muerte.

    Aprenda a hablar con sus seres queridos sobre las pastillas falsificadas

    Mezclar medicamentos de venta con receta con alcohol u otras drogas aumenta los riesgos

    Consumir medicamentos al mismo tiempo que se consume alcohol u otras drogas puede ser peligroso y potencialmente mortal. Los efectos comunes incluyen alteraciones de la percepción, vómitos, cambios en la presión arterial y daño cardíaco. La combinación de medicamentos recetados y alcohol puede provocar derrames cerebrales, ataques cardíacos, insuficiencia hepática, hemorragia interna, daño cerebral y otras consecuencias graves para la salud mental.

    Posibles problemas legales

    Es ilegal usar un medicamento de venta con receta de manera diferente a como fue recetado por un profesional de la salud o cuando lo consume una persona a quien no se le recetó. Es también ilegal consumir un medicamento de venta con receta que alguien le proporciona u ofrecer a alguien un medicamento contra la ansiedad, un analgésico o un estimulante (para el déficit de atención, por ejemplo), pese a que esta persona parezca estar lidiando con estos problemas.

    Se considera uso indebido cuando alguien a quien no fue recetado el medicamento lo consume, incluso cuando lo emplea para el propósito médico para el que fue creado y no busque divertirse o sentirse bajo los efectos de una sustancia. Aunque el delito específico depende del tipo de medicamento utilizado, en qué circunstancias se consume y las regulaciones de cada estado, las sanciones pueden incluir penas de prisión y multas.

    El uso indebido de medicamentos de venta libre también es riesgoso

    Es probable que usted también tenga en casa medicamentos de venta libre para dolores de cabeza, indigestión, fiebre, alergias y estreñimiento, entre otros. Cuando se usan según las indicaciones, estos medicamentos generalmente son seguros. Pero el mal uso intencional sucede cuando un medicamento se consume sin seguir las indicaciones, se consume una cantidad mayor a la indicada o para un propósito que no está relacionado con la salud.

    Además, algunos adolescentes se sienten atraídos por algunos retos popularizados en redes sociales para hacer un uso indebido de medicamentos de venta libre. Uno de esos retos, para tomar grandes cantidades del antihistamínico Benadryl, resultó en la muerte de al menos un adolescente y en la hospitalización de muchos otros más.

    Es importante ayudar a su hija o hijo a entender que el hecho de que estos medicamentos puedan comprarse sin necesidad de receta no significa que sean inofensivos.

    ¿Qué medicamentos se usan de forma indebida con mayor frecuencia?

    Analgésicos opioides (narcóticos)

    Los ejemplos incluyen oxicodona (Oxycontin, Percocet), hidrocodona (Vicodin), fentanilo y tramadol.

    • Para qué se usan de forma indebida: para obtener efectos calmantes y sedantes; provocan la liberación de químicos en el cerebro responsables de la sensación de placer
    • Efectos y riesgos: náuseas, respiración lenta, somnolencia, confusión, falta de coordinación, estreñimiento
    • Sustancia similar: heroína.

    Estimulantes

    Los ejemplos incluyen metilfenidato (Ritalin, Concerta), dextroanfetamina y anfetamina (Adderall XR, Mydayis), dextroanfetamina (Dexedrine).

    • Para qué se usan de forma indebida: para enfocar la atención, aumentar el rendimiento académico o atlético, perder peso, sentirse “drogado” o bajo los efectos de una sustancia
    • Efectos y riesgos: mayor estado de alerta, ritmo cardíaco irregular, presión arterial alta, temperatura corporal alta, disminución del apetito, insomnio, ansiedad, paranoia
    • Sustancia similar: cocaína, metanfetamina

    Depresores (benzodiazepinas/tranquilizantes y barbitúricos/sedantes).

    Los ejemplos incluyen alprazolam (Xanax), diazepam (Valium), zolpidem (Ambien)

    • Para qué se usan de forma indebida: para tener sensación de calma, sueño o bienestar; para contrarrestar o mejorar los efectos del alcohol u otras sustancias, o para sentirse “drogado” o bajo los efectos de una sustancia
    • Efectos y riesgos: somnolencia, confusión, pérdida del equilibrio, dificultad para hablar, falta de concentración, mareos, problemas de memoria, convulsiones
    • Sustancia similar: alcohol

    Cómo proteger a su hija o hijo

    Contrario a lo que muchos padres creen y sienten, la influencia que usted tiene sobre sus hijos tendrá mucho peso en la actitud que tomen frente a los medicamentos de venta con receta, así como en el acceso que tengan a estos productos, si hacen mal uso de estos o se interesan en consumirlos. Es importante saber que, según varias encuestas, los propios niños afirman que la mayor influencia sobre sus actitudes y comportamientos frente al consumo de sustancias son sus padres.

    Conozca los hechos

    Usted puede ayudar a proteger a sus hijos conociendo los riesgos y manteniéndose informado sobre cómo, dónde y por qué los jóvenes obtienen y hacen uso indebido de los medicamentos de venta con receta. Los padres y personas a cargo de niños, adolescentes y jóvenes juegan un papel esencial para filtrar y contrarrestar las influencias que pueden alentar a una persona a hacer mal uso de los medicamento de venta con receta.

    Prepárese para responder de manera honesta, con base en la evidencia y de manera apropiada para su edad, las preguntas que su hija o hijo pueda tener sobre el consumo indebido de medicamentos. Es importante que sus hijos lo vean como una fuente de información completa y confiable. Es mejor que ellos le pregunten a usted cualquier de sus dudas en lugar de que busquen información de fuentes menos confiables como amigos o redes sociales.

    Hable del tema

    No es necesario que se siente a “hablar sobre las drogas”, pero hay muchas ocasiones, incluso en entornos informales, en que usted puede mencionar el uso indebido de medicamentos. Esto puede ser después de la cena, en el camino hacia o desde actividades fuera de la escuela, o mientras ven las noticias o una película. Es importante estar preparado para escuchar a su hija o hijo y tratar de comprender su punto de vista.

    Puede ser útil comenzar la conversación con preguntas abiertas sobre lo que piensan sobre los medicamentos de venta con receta o de venta libre. Trate de evitar tácticas para infundir miedo o las amenazas. En lugar de eso, explique que realmente está preocupado por su salud. Es útil tener conversaciones con frecuencia y, si es posible, antes de que sus hijos tengan acceso a medicamentos. Recuerde que es útil ser claro sobre sus expectativas y mostrar compasión.

    Dé un buen ejemplo

    Si a usted, a un miembro de su familia o a alguien en su hogar le han recetado medicamentos potencialmente adictivos, demuestre que estos productos se usan solo de manera adecuada. Sea un buen ejemplo para su hijo. Asegúrese de tomar las dosis que le recetaron y deseche de manera segura los medicamentos caducos o no deseados. Llame la atención sobre estas acciones para que los niños aprendan con el ejemplo.

    Haga preguntas

    El uso indebido de medicamentos puede comenzar tras obtener una receta válida de un profesional de la salud de confianza. Su hija o hijo puede pensar: “Si mi doctor me recetó estas pastillas, es que deben ser seguras”. Obviamente, hay momentos en que tales medicamentos son necesarios y útiles. Aún así, es importante ser plenamente consciente de los riesgos de estos medicamentos. Aprenda a minimizar las posibilidades de que su hija o hijo los use indebidamente.

    Considere plantear estas preguntas al proveedor de salud de su hija o hijo:

    • ¿Es necesario recetar un opioide para tratar su dolor? ¿Funcionarían alternativas como un analgésico de venta libre? Para el dolor crónico, ¿podemos explorar otros tratamientos como la fisioterapia? ¿Existen terapias sin medicamentos para ayudar a tratar la depresión o el trastorno de ansiedad de mi hija o hijo?
    • ¿Cuántas pastillas le va a recetar y durante cuánto tiempo? ¿Es necesario recetar esta cantidad de pastillas?
    • ¿Cuáles son los riesgos de que este medicamento se use de forma indebida?
    • ¿Cuáles son los posibles riesgos de mezclar este medicamento con otros medicamentos? ¿Y cuáles son los riesgos de mezclar este medicamento con alcohol u otras sustancias que mi hija o hijo está consumiendo?
    • ¿Debería mi hija o hijo someterse a una prueba de detección de un trastorno por consumo de sustancias antes de que le recete este medicamento? ¿Si no, por qué no?
    • ¿Debería mi hija o hijo ser examinado para determinar si presenta factores de riesgo comunes relacionados con el uso indebido de medicamentos, incluyendo problemas de salud mental como depresión o déficit de atención, así como un trauma reciente o antecedentes familiares de adicción? ¿Si no, por qué no?

    ¿Qué hacer cuando le receten opioides a su hija o hijo?

    En caso de que un profesional de la salud recomiende o prescriba un opioide a su hija o hijo, hay preguntas importantes que debe hacer, riesgos que debe conocer y precauciones de seguridad que debe tomar.

    Los analgésicos opioides son drogas poderosas, muy similares a la heroína en su composición química y que crean hábito por su propia naturaleza. El riesgo de desarrollar adicción es particularmente preocupante cuando el paciente es un adolescente o un adulto joven porque su cerebro aún se está desarrollando.

    Conozca qué precauciones debe tomar si le recetan opioides a su hija o hijo

    Signos de uso indebido y cómo tratarlo

    Es importante estar al tanto de cualquier señal de que su hija o hijo pudiera estar haciendo mal uso de la medicación. Los signos físicos del uso indebido incluyen mareos, confusión, náuseas, estreñimiento, respiración lenta y dificultad para hablar. Los cambios en el comportamiento y el estado de ánimo incluyen:

    • Cambios de humor excesivos u hostilidad
    • Parecer agotado o con una energía inusual
    • Cambios notables en los hábitos de sueño
    • Mal juicio para tomar decisiones
    • Solicitar que le resurtan medicamentos de forma anticipada o afirmar haber perdido recetas para obtener más medicamento
    • Buscar recetas de varios médicos
    • Vender medicamentos o recetas

    Si ve que el consumo de sustancias de su hija o hijo afecta su salud, sus relaciones, sus calificaciones o su vida cotidiana, es posible que deba buscar ayuda profesional. Incluso si no hace mal uso de las sustancias con frecuencia, intente abordar el tema. Cualquier uso indebido de sustancias durante la adolescencia y juventud representa un riesgo significativo para la salud y la seguridad de una persona, y aumenta la probabilidad de adicción. Si hay antecedentes de adicción en su familia, hable sobre este riesgo con su hija o hijo, como lo haría con cualquier enfermedad familiar, y explique por qué tiene un mayor riesgo de desarrollar adicción.

    Adopte un enfoque de salud, no un castigo

    El uso indebido de medicamentos es principalmente un problema de salud, no es un problema de disciplina o comportamiento. Comuníquese con el médico de su hija o hijo o con un profesional de la salud lo antes posible para dar prioridad a su seguridad. Asegúrese de que realicen un examen completo que determine el consumo de sustancias de su ser querido, así como el estado de su salud mental y física y los antecedentes personales, médicos y familiares.

    Dependiendo de las necesidades de su hija o hijo, existen distintos tipos de intervenciones y tratamientos.

    • Nuestros programas en línea y de mensajes de texto pueden ayudarle a lidiar con el uso indebido de medicamentos de venta con receta de su hija o hijo, de forma gratuita y confidencial.
    • Siempre que sea posible, pregunte al médico de su hija o hijo sobre las opciones para tratar el consumo de sustancias.
    • Además de la psicoterapia, existen medicamentos altamente efectivos aprobados por las autoridades federales de salud para tratar el trastorno por consumo de opioides.

    No sea tan duro con usted mismo

    Los padres enfrentan muchos retos al tratar de prevenir el consumo de sustancias de cualquier tipo, incluyendo el uso indebido de medicamentos, de parte de adolescentes y jóvenes. Estos retos incluyen la presión de los compañeros, la influencia de los medios de entretenimiento, el estrés escolar y la tendencia natural de los jóvenes a correr riesgos. Con paciencia, amor y las intervenciones adecuadas, usted puede ayudarles a comprender los peligros asociados con el uso indebido de medicamentos de venta con receta, evitar que desarrollen un problema y alentarles a tomar decisiones más saludables.

    El interés de los jóvenes en el consumo de sustancias, incluyendo el uso indebido de medicamentos, seguirá cambiando con el tiempo. Lo único que permanecerá constante es la necesidad de información y apoyo al educar a adolescentes y jóvenes. Las familias son la influencia más importante y poderosa en la vida de los niños. Estamos aquí para ayudarle en ese camino.