Cocaína y Crack: lo que las Familias Deben Saber


La cocaína es una droga que se produce a partir de las hojas de la planta de coca. Es un potente estimulante cerebral y una de las drogas más poderosamente adictivas. El crack es una sustancias que se fabrica partiendo de la cocaína.

También conocida simplemente como “coca”, la cocaína se vende ilegalmente en dos formas principales: el clorhidrato de cocaína, que es un polvo cristalino blanco, y el “crack”, que es el clorhidrato de cocaína que ha sido procesado con amoníaco o bicarbonato de sodio y agua para crear una “cocaína base”, lo que resulta en trozos o rocas.

La cocaína se puede inhalar, frotar en las encías o disolver en agua e inyectarla. El crack se puede fumar. Ambas sustancias producen una sensación de euforia inmediata al inhalarlas, inyectarlas o fumarlas, lo que aumenta la energía y reduce la fatiga.

Aumento en las muertes relacionadas con la cocaína y el crack

Aunque el abasto de cocaína a Estados Unidos parece haberse mantenido estable en los últimos años e incluso aparenta haberse reducido, de acuerdo con la Administración para el Control de Drogas (DEA, por sus siglas en inglés), las sobredosis mortales relacionadas con esta sustancia han ido en aumento. Entre 2012 y 2018, la cifra de muertes por envenenamiento por sustancias que involucraron la cocaína aumentó cada año, y 2018 fue el tercer año consecutivo en que se superaron los 10,000 fallecimientos de este tipo.

El mayor peligro de la cocaína es cuando está mezclada con otras sustancias, especialmente el fentanilo, un opioide sintético que es 50 veces más potente que la heroína y 100 veces más poderoso que la morfina. Muchas de las muertes relacionadas con el consumo de cocaína en los años recientes se deben a su combinación con el fentanilo, según la DEA.

Comprendiendo los riesgos

Los efectos de la cocaína y el crack pueden durar entre una hora o solo unos minutos dependiendo de cómo se consuma. Una vez que los rastros de la droga desaparecen del cerebro, se provoca una especie de resaca que incluye depresión, irritabilidad y fatiga. Fumar cocaína o crack puede producir un comportamiento paranoico particularmente agresivo.

Los signos de consumo de cocaína o crack incluyen inquietud, irritabilidad y ansiedad, pupilas dilatadas, aumento del ritmo cardíaco y la presión arterial, insomnio y pérdida de apetito. A veces, es posible que falte dinero u otros objetos de valor de su casa si su ser querido necesita recursos para pagar por su consumo de sustancias.

A corto plazo, su ser querido puede experimentar problemas para dormir, poca energía, menor deseo sexual, boca seca, hemorragias nasales y poco apetito. A largo plazo, no es raro que las personas que usan cocaína tengan hemorragias nasales, pierdan el sentido del olfato, tengan problemas para tragar, desarrollen asma o contraigan infecciones como el VIH o la hepatitis C por el uso de inyecciones. Consumida durante la adolescencia o juventud, la cocaína puede alterar el cerebro en desarrollo y provocar problemas de largo plazo en el comportamiento como una mayor toma de riesgos en la edad adulta. El uso a largo plazo también puede tener consecuencias para la salud mental, lo que puede incluir depresión e incluso demencia.

Usar cocaína con otras sustancias como la heroína puede ser muy riesgoso. La combinación de cocaína y heroína se conoce en inglés como “speedball”. Si bien proporciona un efecto más potente, esta mezcla también puede aumentar el riesgo de sobredosis.

Los signos de una sobredosis pueden incluir dificultad para respirar, dolor de pecho, náuseas, ansiedad, pánico, paranoia y confusión. Las consecuencias graves pueden incluir un ataque al corazón, un derrame cerebral y convulsiones. Si detecta estos signos en un consumidor de cocaína, no espere, llame al 911.

Como han detectado las autoridades de Estados Unidos, cada vez es más común que la cocaína esté mezclada con fentanilo, una sustancia que puede deprimir la respiración y provocar una sobredosis. El uso de naloxona (vendida bajo la marca Narcan) puede revertir una sobredosis de fentanilo si se usa a tiempo.

Identificar y entender el por qué del consumo

Es útil tratar de comprender las razones por las que su ser querido podría verse tentado a probar la cocaína o el crack. Puede ser por la búsqueda de sensaciones excitantes o para lidiar con emociones negativas como la ira, la frustración, el miedo, la tristeza, el aburrimiento, la soledad, la culpa o la vergüenza.

Algunas personas piensan que la cocaína les dará energía, les ayudará a controlar su peso o a disfrutar más las interacciones sociales. Si bien esto puede ser cierto a corto plazo, la cocaína y el crack pueden resultar adictivos y tener muchas consecuencias físicas y emocionales.

Saber la razón por la que su ser querido consume cocaína o crack les ayudará a encontrar formas más saludables de remplazar estas necesidades y puede ser un paso positivo hacia la recuperación y el bienestar.

Es también útil hablar con su ser querido sobres cómo evitar el consumo de cocaína o el crack, en especial si estas sustancias están fácilmente disponibles en su comunidad. Hablar con ellos acerca de cómo podrían negarse si les ofrecen sustancias y ensayar con ellos posibles respuestas puede ser de gran ayuda.